Delgadez saludable a largo plazo ¿Cómo lograrla?


Frase para reflexionar:

Delgadez saludable

“Vivir con el cuerpo en delgadez saludable a largo plazo es un trabajo en sí mismo, pero es un trabajo placentero si se lo encara desde el concepto de la suficiencia”. 

Richard Frenkel

La delgadez saludable a largo plazo no se logra haciendo las tradicionales, antiguas, viejas, obsoletas, perimidas y cortoplacistas dietas restrictivas reengordantes del siglo veinte, sino que se logra incorporando a la vida el liberador concepto de la suficiencia y entrenando la medida de lo suficiente de alimentos y agua, que permita tener a diario al cuerpo correctamente nutrido e hidratado sin que los excesos de comidas, bebidas azucaradas y/o alcohólicas formen grasa extracorporal. El concepto de la suficiencia como marco general de vida, la medida de lo suficiente en el plato y el bocado de lo suficiente en la boca, te permitirán vivir con paz, calma y alivio en la mente, el cuerpo en delgadez saludable, sin excesos ni faltas y con lo suficiente en todas las demás áreas de la vida. 

Una vez que usted, tiene el P.A.S.S. (Plan de Alimentación Saludable y Sostenible), visualizada y entrenada la medida de lo suficiente de alimentos y agua que su cuerpo requiere para estar perfectamente nutrido e hidratado, ya no hay nada más en que ocuparse respecto a la nutrición e hidratación de su cuerpo, sino que toda la atención deberá ser puesta en como hacer para llevar a cabo el proyecto de delgadez saludable a largo plazo que se ha puesto como proyecto de vida

«La delgadez saludable a largo plazo es una actitud mental, el cuerpo siempre acompaña”. Richard Frenkel

Si en todos los intentos anteriores para lograr la delgadez saludable a largo plazo la atención estuvo puesta en las “dietas restrictivas” que había que realizar, pensando continuamente en las “comidas” que no se iban a poder comer “nunca más” y sufriendo porque lo servido en el plato era “poco” o la “porción” era pequeña, esta vez va a ser total – mente (en la mente en forma total) diferente.

Esta vez lo que va a haber en el plato, cada vez que usted se siente frente a una mesa para efectuar los actos de alimentación que su cuerpo requiere cuatro veces al día, será la medida de lo suficiente que usted quiso y eligió para nutrir a su cuerpo delgado y saludable que siempre está dentro de usted, en ese momento. Los cuatro actos de alimentación (desayuno, almuerzo, merienda y cena) deben ser actos “sagrados y sublimes”, como “sagrado y sublime” es su cuerpo y “sagrada y sublime” es su vida y deben tratarse como tales, con la importancia que se merece cada acto y la interacción con usted en ese preciso momento.

En este caso vamos a referirnos al almuerzo y la cena. Los dos actos en sí mismo, son de vital importancia (vital significa vida), porque su historia viene demostrando que nunca los tuvo en cuenta con la suficiente importancia en su vida, como para organizarlos de manera tal para que actúen a su favor y no en contra. También debe ser “sagrado y sublime” para usted, porque los actos de alimentación están formados y se concretan por varias partes, que tienen que estar perfectamente sincronizadas entre si, a saber:

Primero y principal: usted, su cuerpo y su proyecto de delgadez saludable a largo plazo y luego y en armonía: la mesa, la silla, los cubiertos, los platos, los vasos, las servilletas, los condimentos, los líquidos naturales o fríos del minuto cero, los líquidos calientes del minuto siete, la picada, el tentempié o la ensalada del minuto 14, el alimento y su acompañamiento en la medida suficiente a partir del minute veinte y la infusión caliente de cierre, como finalización del acto antes de levantarse para la caminata post-prandial de 15 minutos.

Pregunta para reflexionar:
¿Usted se puso a pensar alguna vez para qué se sienta frente a una mesa?

Seguramente la primera respuesta que aparecerá en su mente es: para desayunar o para almorzar o para tomar la merienda, para cenar o simplemente. En síntesis: ¡Para comer y sacarme el hambre!

Recuerde que todo lo que usted hizo hasta ahora, lo llevo a estar como está ahora.

Recuerde que las palabras que usted mismo se dice a usted mismo condicionan su propios pensamientos, sus pensamientos condicionan sus sentimientos, sus sentimientos condicionan sus acciones y sus acciones condicionan su vida y los resultados que obtiene de  ella.

 

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

Publicar comentario